HOUSTON – Jasmine Bonner, la oficial del Departamento de Policía (HPD por sus siglas en inglés) acusada de posesión de cocaína con la intención de distribuirla aceptó su responsabilidad y enfrenta una sentencia de hasta 40 años en prisión.
La oficial, de 27 años era la última de las ocho personas arrestadas en un operativo llevado a cabo en el Condado Montgomery en el año 2014.
Bonner admitió su rol en la operación de tráfico de narcóticos ante la fiscal federal Nancy Atlas. La exoficial de policía aceptó haber ayudado a Derryck Collins –quien para entonces era su novio- y quien era identificado como un importante proveedor de drogas en el área de Huntsville, unas 70 millas al norte de Houston.
La mujer fue arrestada cuando un agente encubierto realizó una transacción de drogas mientras ella conducía el auto y su entonces novio finiquitaba la venta.
La jueza Atlas estableció el próximo 6 de octubre como la fecha en la que se le dictará sentencia, la cual puede ascender a 40 años de prisión y una multa de hasta $5 millones.
Los otros condenados por este caso son Collins, David Choate, Micahel Kelly y Rodrick Collins, residentes de Huntsville y Jarvis Lovelady, Javier Gomez Aguirre, y Carlos Montemayor de Houston.
En la investigación participaron agentes de la DEA, el Buró de Alcohol, Tabaco y Armas, así como varias agencias locales y condales.
