HOUSTON – La jornada de limpieza tras la destrucción causada por una fuerte tormenta este martes en la noche empezó para los habitantes de Sealy, una pequeña población a unas 30 millas al oeste de Houston.
Los destrozos dejados se vieron reflejados en casas destruidas, techos de negocios levantados, árboles arrancados de raíz, camiones volcados, ventanas rotas, entre otras.
La tormenta es analizada por el Servicio Nacional de Meteorología para determinar si la fuerza de los vientos alcanzó el nivel de tornado.
Durante este miércoles en la mañana, los residentes del área empezaron a sacar los escombros de lo que quedó y a evaluar la dimensión de los daños.
About 200 @CNPalerts workers are in #Sealy trying to restore power. 250 poles down-restoration is not an easy job. Thank you! @Fox26Houston pic.twitter.com/w64DZvVIGI
— Sally MacDonald (@SallyMacFox26) May 24, 2017
La escuelas de la ciudad no operaron este miércoles, mientras que el paso de vehículos por la interestatal 10 –la cual estuvo cerrada por casi 12 horas- fue reabierto.
Uno de los mayores impactos sufridos por los residentes de Sealy fue la caída de los postes de la luz, pues alrededor de 250 quedaron en el piso.
Según la compañía Centerpoint Energy, alrededor de 3,000 clientes perdieron el servicio de energía eléctrica y su restauración tomará entre dos a tres días.
