Mientras un grupo de madres en Arlington organizan talleres informativos para preparar a los residentes ante la SB4, algunas familias ya tienen decidido ir de Texas.
Ante la implementación de dicha ley a partir del 1 de septiembre, inmigrantes indocumentados en el norte de Texas tienen miedo, tienen coraje, sienten impotencia porque muchos han vivido tranquilamente en este estado por muchos años.
''Yo me voy molesto de aquí, enfadado, muy decepcionado'' exclama Javier Ocegueda Diaz, un expolicía antinarcóticos que tuvo que inmigrar tras amenazas de muerte.
Y es que la SB4 obligará a policías estatales, locales y de condados a realizar tareas de agentes de inmigración.
Por una mínima parada de tráfico, los agentes tendrán obligación de preguntar el status migratorio y de ser personas indocumentadas, serán detenidas y llamaran a ICE para que lleguen por ellos.
El agente que no lo haga, será sancionado económicamente y hasta con cárcel.
''Estoy aquí desde hace 20 años, tengo familia, trabajo, un patrimoniáo y ahora me siento perseguido y he tomado la decisión de irme a California'', refirió Don Javier quien ya ha empezado a empacar.
Local
En Arlington, un grupo de madres, algunas residentes y otras indocumentadas, aseguran que mientras más información se conozca sobre sus derechos más pueden hacer para proteger a sus familias.
Ahí, un exsargento de la policía de Dallas, Gil Cerda, compartió consejos básicos como tener todos los documentos en reglas, que el auto tenga todas sus luces funcionando, no pasarse la luz en rojo y no manejar a alta velocidad.
''Es que no hay que darles ningún pretexto para ser detenidos'', dijo una de las madres organizadoras de la reunión.
