Houston.- Según la ley de Prácticas Comerciales Fraudulentas de Texas, está prohibido vender alimentos de primera necesidad así como combustible y medicinas a precios exorbitantes cuando existe una declaración de desastre estatal vigente.
La ley en mención fue implementada en 1973 y su principal objetivo es proteger a los consumidores que son víctimas de ventas de artículos a precios elevados en situaciones de emergencia.
El gobernador de Texas Greg Abbott declaró zona de desastre a un buen número de condados, lo que permite al gobierno estatal enviar asistencia para ayudar en las labores de reconstrucción.
Quienes infrinjan lo dispuesto serán sancionados conforme a lo establecido por la ley.
Si usted cree que ha sido víctima de este tipo, puede llamar a la Oficina de Protección al Consumidor de la Procuraduría General de Texas al 1-800- 621-0508 o enviar un correo electrónico a consumeremergency@oag.texas.gov.