HOUSTON – Alfredo Flores se subió esta mañana al avión de US Airways con la expectativa de que será uno de los viajes más emocionantes de su vida, ese en el que pudiera ver al Papa Francisco.
Flores es miembro de un grupo de estudiantes de la preparatoria jesuita Strake de Houston que este jueves se embarcó en esta aventura.
El será uno más de las casi un millón de personas que esperan escuchar la misa del Papa este domingo, el gran cierre del viaje del Santo Padre por Estados Unidos.
Flores dice que siente mariposas en el estómago al saber que va a ser testigo de la historia.
El grupo con el que viaja espera una conexión espiritual que desea le acerque más a Dios, ya que -para ellos- es una bendición estar en su presencia aunque sea a la distancia.
A este viaje le llaman en la escuela "el peregrinaje espiritual". Flores va a pasar la noche en bolsas de dormir dentro de un salón de clase similar a donde él estudia.
Para Flores y sus compañeros es motivo de orgullo que Francisco es, además, el primer papa jesuita, al igual que su escuela.
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Sus amigos le pedían que orara por ellos cuando estuviera ante el Papa y le contó a Telemundo Houston –embarcado en el mismo avión- que son tantos que trae consigo una lista para mencionarlos a todos en sus oraciones.
