AUSTIN - El asediado Jefe de Elecciones de Texas que cuestionó la ciudadanía de casi 100,000 personas renunció antes de ser expulsado de su cargo.
El secretario de Estado, David Whitley, nunca logró el voto de confirmación para su cargo antes de que la Legislatura de Texas terminara la sesión número 86.
Abbott mantuvo públicamente las esperanzas de que Whitley sería confirmado antes de que la sesión legislativa en Texas terminara. Pero el destino de Whitley había aparecido casi sellado durante meses.
Los demócratas bloquearon una votación sobre su nominación después de que la oficina de Whitley encabezó un estropeado escrutinio de las listas de votantes en enero que identificó erróneamente a miles de personas como no ciudadanos, desencadenó preguntas del Congreso y llevó al estado a resolver una demanda federal.
Whitley no abordó la búsqueda de votantes en su carta de renuncia a Abbott.
"Trabajar junto con los empleados de la oficina del secretario de estado, los funcionarios de elecciones del condado y los representantes de nuestro socio comercial número 1, México, ha sido un gran honor y privilegio", escribió Whitley, de acuerdo con una carta obtenida por los medios locales.
Los demócratas durante meses dijeron que Whitley perdió su confianza.
