El Servicio de Parques Nacionales informó que están investigando actividades ilegales tras descubrir cinco burros que fueron asesinados a tiros en la zona de Wildrose en el Death Valley.
Las autoridades recordaron que “es ilegal disparar un arma de fuego en un parque nacional y representa una amenaza para la seguridad pública”. Además, los casquillos de las balas son nocivos para las especies nativas.
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Los burros son animales que no hacen parte del ecosistema del desierto, y su presencia en este hábitat hace que compitan por recursos limitados como agua y comida con otros animales para los cuales este es su entorno natural.
Existe una agencia de gestión de tierras que se encarga de removerlos y ubicarlos en entornos apropiados. Pero, las autoridades confirmaron que la muerte de estos animales no hacen parte de “ningún esfuerzo de remoción interna”, informaron en un comunicado.
“Si bien estos animales tienen un impacto negativo en el entorno natural y cultural del desierto, estas acciones irresponsables no están justificadas”, informaron las autoridades del parque nacional.
Si tiene información sobre este caso, le piden que llame o envíe un mensaje de texto a la línea de información del Servicio de Parques Nacionales: 888-653-0009.
También puede enviar una pista a go.nps.gov/SubmitATip.
