HOUSTON - Uno de los pilares de la campaña presidencial y de la política migratoria del presidente Donald Trump es la eliminación de la ciudadanía americana por nacimiento en territorio estadounidense.
Esta, ha sido criticada ampliamente y, francamente, resultaría muy difícil de lograrse.
Por esta razón, el presidente ha decidido darle la vuelta al asunto y ha encontrado una nueva manera de limitar dicha ciudadanía: limitar el acceso a visa a mujeres en estado de embarazo.
Bajo la más reciente regla propuesta por la administración de Trump, aquellas mujeres sobre las cuales el gobierno tenga un motivo para pensar que están embarazadas, les podría ser denegadas la entrada a los EE.UU.
A pesar de que esto no es algo nuevo y que lleva haciéndose durante años, la nueva regla de Trump cambia dramáticamente la forma en que opera este criterio.
Actualmente, oficiales del Departamento de Estado pueden negarse a emitir una visa a una mujer a quien ellos creen que pretende venir a los Estados Unidos con el propósito de tener a su hijo o hija aquí, para que se le confiera la ciudadanía americana.
Sin embargo, esa razón consiste en básicamente una admisión de la mujer de que ese es su propósito.
No obstante, bajo la nueva regla de Trump, bastaría con que el oficial determinara que, por ejemplo, con el mero aspecto de una mujer, esta está embarazada. Al hacer dicha determinación, bajo la nueva regla, el oficial vendría obligado a concluir que el propósito de la visita es dar a luz en los EE.UU, para conseguir la ciudadanía de su hijo o hija.
La regla también podría dar paso a que las mujeres sean sometidas a pruebas de embarazo antes de entrar al país.
Mientras que la administración de Trump defiende la regla indicando que es necesaria por el alza en lo que llaman “turismo de partos,” aquellas personas que la criticamos pensamos que no es más que otra herramienta para discriminar contra las mujeres, especialmente, aquellas provenientes de países pobres.
La razón es que a los ciudadanos de muchos de los países europeos o con economías más estables no le es requerido tener una visa para entrar a EE.UU. La otra razón es que la excepción a esta regla consiste en que la mujer no sólo debe justificar querer dar a luz en los EE.UU. por razones médicas, sino que debe, además, demostrar que cuenta con los recursos económicos para pagar los gastos del parto en el país.
Algunos de los estimados preliminares indican que esta nueva regla podría afectar alrededor de 10,000 personas (mujeres) anualmente, una cantidad sumamente considerable.
De esta manera, le recomiendo que si usted o algún familiar cree que puede ser afectado por la misma, se mantenga al pendiente de los medios noticiosos o que busque asesoría profesional con una abogada o abogado con licencia y buena reputación.
