HOUSTON – Una mujer de Houston acusó al presidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos y cardenal de la Arquidiócesis Galveston-Houston, Daniel DiNardo, de administrar mal una acusación de abuso sexual contra quien fuera su segundo a bordo por varios años, monseñor Frank Rossi.
Según documentos obtenidos por Associated Press, el cardenal Dinardo escuchó en diciembre de 2016 la denuncia de la mujer, identificada como Laura Pontikes, quien aseguró haber sostenido una relación sexual con Rossi, luego de que ella buscó consejo espiritual, pero un par de meses después se enteró que Rossi había sido designado como pastor en la iglesia Nuestra Señora de los Pinos en Woodville, una población ubicada a unas 100 millas al noreste de Houston.
Cuando el esposo de Pontikes confrontó tiempo después a DiNardo, este -según documentos obtenidos por AP, habría advertido que la arquidiócesis respondería agresivamente a cualquier proceso legal y que esto terminaría afectando a la familia y sus negocios.
Este martes, luego de varios requerimientos escritos de AP, la iglesia decidió remover a Rossi de sus funciones y anunció en un comunicado que este sería puesto en licencia administrativa.
Esta denuncia de Pontikes hace parte ahora de una investigación criminal centrada en Houston.
La próxima semana, Dinardo liderará una reunión de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos en Baltimore donde se espera que presente nuevas propuestas para establecer mejores responsabilidades en casos de denuncias de abuso sexual.
El Papa Francisco ha reconocido, recientemente, en diferentes escenarios los errores de la Iglesia Católica frente al tema de las denuncias contra sus miembros.
Local
Bajo las leyes de Texas, un clérigo puede ser acusado de abuso sexual si este explota la dependencia emocional en una relación espiritual.
Según el abogado de Rossi, Dan Cogdell, este está cooperando con las autoridades.
