HOUSTON – Una llamada al 911 de un hombre que vio en la calle su camioneta robada el pasado domingo mientras asistía a la iglesia fue el origen de la larga persecución policial que duró más de media hora este jueves al mediodía por las calles del suroeste de Houston.
Guillermo Márquez transitaba por el área de Navigation, cuando vio pasar su camioneta Toyota Tacoma de color negro que le habían robado mientras profesaba su fe en una iglesia de esa zona de la ciudad.
La reacción de Márquez fue la de llamar al 911 mientras que él -sigilosamente- seguía al conductor en su camioneta. De esta forma advertía en tiempo real a las autoridades por dónde se movilizaba el vehículo que usaba para su trabajo.
Cuando los oficiales se cruzaron con el conductor de la Toyota Tacoma y le hicieron señales para que se detuviera este emprendió la huida.
Lo hizo a alta velocidad por la autopista 45 sur y a baja velocidad por calles de vecindarios como Magnolia Park, Harrisburg y Lawndale, entre otros, hasta que uno de los seis oficiales utilizó la táctica de golpear la camioneta por un costado en la parte trasera e hizo que el sospechoso de robo perdiera el control y se detuviera.
Inmediatamente, los oficiales arrestaron al hombre hispano que se bajó y se lanzó al suelo.
Mientras tanto, el señor Márquez logró llegar a la escena y no pudo ocultar su felicidad por el hecho de recuperar su camioneta.
