HOUSTON - Autoridades de la ciudad de Baytown revelaron que Kirsten Fritch, la menor de 16 años hallada muerta la semana pasada en un paraje desolado en Texas City, murió de 60 puñaladas.
Los investigadores de BPD acusaron a Jesse Dobbs por la muerte de la menor.
La menor fue encontrada con puñaladas en su cara, cuello y torso y que, tras la autopsia, quedó en evidencia que ella se trató de defender del ataque.
El cuerpo de Fritch había sido remitido desde el pasado 11 de noviembre a la división de ciencias forenses de Galveston.
El Departamento de Policía de Baytown considera a Dobbs como sospechoso por la muerte de la madre de Kirsten y de su hermana menor, quienes fueron halladas baleadas dentro de una casa en Baytown.
"Detectives y la Oficina del Fiscal del Condado Galveston trabajan en el homicidio de Kirsten y en los homicidios de Cynthia y Breanna y creen que estos están conectados", agregó la policía de Baytown hace unos días.
Los investigadores revelaron que Dobbs ha refusado a cooperar.
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De acuerdo con las autoridades, el cuerpo fue hallado por miembros de Equusearch, quienes se toparon con este mientras inspeccionaban la zona en cuatrimotos.
El área donde fue encontrada Kirsten está ubicada detrás del bar donde fue arrestado Jesse Dobbs, quien sostenía una relación con la adolescente.
Jessie Dobbs fue detenido en el bar el pasado martes en la noche y estaba en posesión del automóvil de Cynthia Morris, la madre de las menores.
Fritch es hija de Cynthia, quien fue hallada dentro de una casa con, al menos, un balazo en su cuerpo, y hermana de Breanna, de 13 años, que registraba la misma condición.
Dobbs, de 21 años, está recluido en la cárcel condal de Galveston con una fianza de $500,000.