HOUSTON – A partir de este martes, los residentes del Condado Galveston vieron cómo la capacidad operativa de sus restaurantes fue reducida y se anunció el cierre de los bares de la zona.
Esto, ante el incremento en el número de personas hospitalizadas a causa del COVID-19.
El Condado y la ciudad están incluidos en el Trauma Service Area (TSA) identificada por las autoridades estatales como una en la que se ha registrado un número de ocupación mayor al 15% del total de la capacidad hospitalaria debido a la pandemia.
Para que las restricciones sean levantadas deberán pasar, al menos, siete días consecutivos en que ese número esté por debajo del 15%.
Otros condados del área afectados por esta decisión estatal son Brazoria, Chambers, Hardin, Jasper, Jefferson, Liberty, Newton y Orange.
Los restaurantes solo podrán operar al 50% de su capacidad.