HOUSTON - En medio de una ola de calor, las paradas de autobuses de METRO se han convertido en una verdadera molestia para los usuarios de este servicio de transporte.
Mientras las recomendaciones indican que durante olas de calor extremo se debe mantener en el interior, no siempre es posible para los miles de houstonianos que dependen del transporte público.
"En nuestros días más calurosos, cada minuto de espera en el autobús significa un minuto expuesto a los elementos", dijo Gabe Cazares, del grupo de defensa LINK Houston. "El estrés por calor es especialmente alto en las comunidades que dependen más de Metro".
Aproximadamente 200,000 personas en Houston utilizan el transporte público cada día, pero muchas paradas carecen de refugios y sombra adecuados.
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Según datos analizados por Houston Public Media, menos de una cuarta parte de las paradas de autobús de Houston proveen algún tipo de refugio contra el sol.
Los usuarios afirman que muchos de las paradas que existen parecen estar diseñados más para la lluvia que para el calor extremo, muchos incluso los describen como "hornos".
