HOUSTON — Una familia del norte de Houston vive momentos de angustia luego de que Felipe de Jesús López, de 56 años, y su hermano Aristeo, de 63, fueran detenidos tras una parada de tránsito que, según sus seres queridos, tuvo como excusa “llantas sospechosas y vidrios polarizados”.
Ambos regresaban de instalar un sistema eléctrico en una escuela pública en Beeville, Texas, junto a otros compañeros de trabajo, cuando una patrulla del alguacil del condado Goliad los detuvo en carretera.
Noticias Texas 24/7 en Telemundo Houston.

Solo los hermanos López, originarios de México, fueron referidos a la Patrulla Fronteriza y trasladados posteriormente a un centro de detención en McAllen, según relata la familia.
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La esposa de Felipe, Ana Marina Alonzo, dijo entre lágrimas: “Toda la noche fue una desesperación, no saber dónde estaban, llamar y no obtener respuestas”.
Su hija menor se gradúa de la preparatoria el próximo miércoles. “Mi sueño era que él estuviera allí”, expresó su madre con la voz entrecortada.
La abogada de inmigración Alma García Rivera considera que se trató de una parada pretextual y espera liberar a Felipe bajo fianza debido a su historial limpio. “Llantas sospechosas” no es una causa válida común, afirmó.
Telemundo Houston intentó obtener comentarios del Departamento del Alguacil del condado Goliad y de ICE, sin respuesta al cierre de esta nota.
Mientras tanto, la familia recauda fondos y mantiene la esperanza de reunirse pronto, antes de que una deportación acelerada se convierta en realidad.
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