Dos semanas después de haberse dado la explosión que destruyó la compañía Watson Grinding & Manufacturing se conoció que hay uan tercera víctima mortal, presuntamente, a cuasa de esto.
Se trata de Gilberto Mendoza, un hombre de 47 años a quien le cayó encima el techo de su casa en la madrugada del 24 de enero pasado.
La casa de Mendoza estaba ubicada a unos 300 metros de la empresa afectada, pero la onda explosiva derribó el techo de su casa.
Cruz fue llevado a un hospital, de donde fue dado de alta días después, pero una complicaicón médica terminó costándole la vida.
Cruz dejó esposa, un hijo de 12 años y una hija de seis, quienes también resultaron heridos.
En la explosión murieron dos empleados hispanos de la compañía.