HOUSTON – Con el calendario marcando el 20 de septiembre a la vuelta de la esquina, es casi imposible no escuchar a más de uno cuestionarse sobre la vacuna de refuerzo para el coronavirus.
Y es que tras el anuncio del presidente Biden, de que a partir del 20 de septiembre todos los completamente vacunados podrán a obtener un refuerzo, la duda está a la orden del día.
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La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDApor sus siglas en inglés)pide cautela, ya que todavía no se han revisado todas las evidencias científicas para autorizar los refuerzos.
Sin embargo, estas ¨booster shot¨ o vacunas de refuerzo ya se están administrando entre aquellos con alguna inmunodeficiencia.
Este es el caso de Libertad Betancourt, una residente de Houston, quien afirma que ya se administró la tercera dosis de Pfizer, pero su experiencia no fue para nada favorable.
"Esta dosis fue definitivamente más fuerte, me dolían los riñones y tenia muchas ganas de llorar" declaró la señora Betancourt.
Testimonios como estos han causado confusión, incluso miedo y es que quienes ya se pusieron el refuerzo, aseguran los efectos secundarios de la tercera vacuna fueron tan fuertes, que por ejemplo algunos hasta decidieron cancelar la inoculación de sus hijos.
En el otro lado de la moneda, están los galenos, quienes insisten que el remedio sigue siendo mejor que la enfermedad.
El doctor Rodrigo Hasbún, infectólogo del Memorial Herman asegura que la situación amerita una tercera dosis porque estos pacientes terminan intubados.
Según el gobierno federal, Pfizer pide que todos los completamente inoculados con su vacuna obtengan otra dosis completa como refuerzo. La farmacéutica Moderna, al parecer, pide solo media dosis, mientras que Johnson and Johnson una dosis completa más.
Se a cuál sea la disposición final, expertos de la salud piden paciencia y calma ya que todo está en manos de la ciencia.
Aseguran serán los científicos y especialistas de la FDA y los centros para el control y la prevención de enfermedades, quienes, basados en estos estudios, tendrán la última palabra sobre cual es la dosis correcta y cuanto tiempo se debe esperar para el refuerzo.
