HOUSTON – El fallido operativo antidrogas que dejó dos muertos en la calle Harding de Houston sigue dando de qué hablar.
Este martes, la defensa del oficial Felipe Gallegos, acusado de homicidio, manifestó que su cliente sirvió de apoyo durante la redada, pero que nunca supo cómo se obtuvo la orden para ejecutarla.
Gallegos hace parte del grupo de nuevos policías involucrados en este caso y que fueron anunciados por la fiscal del Condado Harris, Kim Ogg.
En este operativo, ocurrido en enero de 2019, murieron Dennis Tuttle y Roshena Nicholas.
De acuerdo con el abogado Rusty Hardin, Gallegos repelió al fuego de Tuttle.
La redada fue autorizada, según la Fiscalía, basada en documentos manipulados, testimonios falsos.
Hardin asegura que su cliente cumplió con su deber sin saber cómo se había llegado a la orden de cateo. Gallegos quedó en libertad bajo fianza mientras continúa la investigación.
