Muñecas sexuales para pedófilos causan indignación

El fundador de la empresa fabricante dice que "ayudan a controlar impulsos".

Una empresa japonesa se ha puesto en el ojo del huracán, por comercializar muñecas sexuales con aspecto infantil, según informa el periódico británico The Mirror.

Se trata mayormente de réplicas de niñas que son compradas por pedófilos.

La empresa Trottla ya lleva diez años funcionando, pero recién ahora ha surgido el escándalo, a raíz de las declaraciones de su fundador, Shin Takagi.

El propio Takagi, quien según el diario se incluye entre los que tienen que lidiar con esos deseos enfermizos, asegura que "es una manera de ayudar a gente que quiera expresar sus deseos legal y éticamente".

Las muñecas representan claramente a niñas, sin pechos ni vello.

Cientos de padres de familia indignados calificaron las muñecas de "desagradables", porque creen que normalizan un comportamiento retorcido.

Los lectores del Mirror escribieron que les repugnaba la idea, porque "cualquier clase de deseo sexual hacia niños está mal y no debe ser estimulado de ninguna manera".

No faltaron quienes opinaron que los pedófilos no tenían más opción que suicidarse.

Solo unos pocos expresaron que no es mala idea, porque las muñecas canalizan los bajos instintos de los pederastas y así protegen a los niños de carne y hueso.

Takagi agregó que "debemos aceptar que no hay forma de cambiar el fetichismo de alguien", según el Mirror.

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