HOUSTON – Llegó la hora de reabrir la ciudad. Así por lo menos lo ordenó el gobernador de Texas, Greg Abbott, y a partir de las 12 de la medianoche de este viernes se empexzó el camino para retornar a la normalidad, luego de casi siete semanas en las que la mayoría de la población ha estado resguardada en sus casas.
Este viernes, en el Día Internacional del Trabajo, empleados de centros comerciales, restaurantes, tiendas y algunos cines volverán a sus labores. Eso sí, con una capacidad reducida al 25%.
A pesar de la reapertura, las autoridades locales, como el alcalde Sylvester Turner, ha insistido en que las recomendaciones de distanciamiento social y uso de mascarillas o tapabocas seguirá siendo fundamental para que no haya un rebrote del virus.
La reapertura también viene con la necesidad de reabrir las actividades económicas, luego de que Houston ha sido el área más afectada en el estado por la crisis económica generada por la pandemia del coronavirus.
Se estima que alrededor de 300,000 personas han perdido su empleo en el área metropolitana.
La mayoría des estas pérdidas están en el área de los restaurantes, los consultorios odontológicos y los hoteles.
3,600 casos de contagio del coronavirus y 56 muertes ha sido el saldo, hasta ahora, del paso del virus por la ciudad de Houston.
Muchos negocios están a la expectativa no solo ante la expectativa de reabrir sus puertas, sino de ver si con capacidad reducida pueden ser financieramente viables.
Ahora, Houston, al igual que el resto de las ciudades de Texas, espera que en dos semanas pueda incrementar la capacidad de ocupación de los negocios.
Sin embargo, depende de que la comunidad conserve la prudencia y las normas de responsabilidad social.
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