HOUSTON – El tan anunciado cierre de las rampas conectoras entre la autopista 59 y el periférico 610 que fue aplazado hace un par de semanas debido a las lluvias que azotaron la ciudad, finalmente se llevará a cabo este jueves en la noche.
De esta forma, se da inicio a las obras de demolición de las rampas.
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El proyecto contempla que hasta principios del año entrante las personas que normalmente transitan por la autopista 59 y tienen que tomar alguna de las rampas de conexión del periférico 610 deberán llenarse de paciencia.
El proyecto contempla la demolición de la rampa hacia el 610 norte desde la autopista 59 en sentido norte.
Así mismo, de la rampa hacia el sur de la 610 desde la autopista 59 norte.
El proyecto es liderado por el Departamento de Transporte de Texas.
